lunes, 8 de abril de 2013

Crónica del Lunes Santo 2013


       Desde tempranas horas de la mañana los pasos de nuestros Titulares recibieron en nuestra Iglesia Mayor Parroquial de San Pedro y San Pablo numerosas visitas, institucionales, de las Hermandades del día, y de muchos hermanos y devotos. Una jornada con gran preocupación por la meteorología, ya que durante casi toda la mañana estuvo lloviendo, y alentando un pronóstico incierto de cara a la salida procesional.
         Destacar en primer lugar, por considerarlas como parte de nuestra Estación de Penitencia, las dos iniciativas solidarias que la Archicofradía viene realizando durante el Lunes Santo. Por un lado, el donativo procedente de nuestra Bolsa de Caridad “Virgen de la Trinidad”, para sufragar las comidas a dispensar en ésta jornada, tanto del comedor social “El Pan Nuestro”, como del Hogar “Federico Ozanam” de la Sociedad Benéfica San Vicente de Paúl.
         Por otro lado, y por quinto año consecutivo, la Archicofradía dio apoyo a la donación de órganos y tejidos, pudiéndose apreciar en ambos pasos una vela con el lema elegido para su concienciación, “LAGRIMAS DE VIDA”, a propuesta de nuestra amiga, la periodista sevillana, Susana Herrera Márquez, que está erigiéndose a nivel nacional, como promotora principal de éste tipo de iniciativas.
         La Estación de Penitencia estaba dedicada a la Orden Trinitaria, que celebra en 2013 Año Jubilar Trinitario, por la conmemoración del VIII centenario de la muerte de San Juan de Mata, Fundador de la Orden de la Santísima Trinidad, y del IV de la muerte de San Juan Bautista de la Concepción, Reformador de la Orden.
             Como estaba previsto, a las 17:30 horas comenzó la Eucaristía preparatoria de la Estación de Penitencia, destacando el alto número de participación de hermanos/as y siendo concelebrada por: 
-         Rvdo. P. Alfonso Gutiérrez Estudillo, Arcipreste de la ciudad, Párroco de la Parroquia de la Sagrada Familia de San Fernando, Pregonero de la Semana Santa 2013 de la Isla y Hermano de la Archicofradía.
-         Rvdo. P. Jesús Guerrero Amores, Párroco de la Iglesia Mayor Parroquial y Director Espiritual de la Archicofradía.
-         Rvdo. P. Pedro Enrique García Díaz, Vicario de la Iglesia Mayor Parroquial y Consiliario de la Archicofradía.
-         Rvdo. P. Fray Ángel Palomino Outon, miembro de la Orden de Carmelitas Descalzos y hermano de la Archicofradía.
         El paso del Señor fue exornado con un monte de lirios morados, dedicado a la comunidad de las Rvdas. Madres Clarisas Capuchinas de San Fernando, como señal de celebración del XXV aniversario de la Carta de Hermandad entre ésta comunidad de religiosas y nuestra Archicofradía, ya que el lirio es la flor que representa la pureza, la inocencia y la castidad, signos que se identifican con nuestras queridas hermanas. Mientras que el paso de la Virgen fue exornado en su friso y en sus jarras con rosas blancas.
          
         Éste año se estrenaba el dorado de la parte trasera del paso de Jesús de Medinaceli, trabajos realizados por el taller sevillano “Artesanía del dorado Hermanos González”. Aunque la parte frontal ya fue dorada para la Semana Santa de 2012, no se pudo exhibir en la Salida Procesional, al igual que el Arcángel Sacramental ejecutado por D. Fernando J. Aguado Hernández, debido a que ésta fue suspendida por riesgo de lluvia.                   
           María Stma. de la Trinidad lució una nueva corona de plata, de estilo Rocaya e inspirada en las antiguas coronas realizadas en los siglos XVII y XVIII para imágenes de la Virgen María. Esta bella joya ha sido realizada por el orfebre local D. Miguel Cuadros Belizón, siendo donada por un nutrido grupo de hermanos. Asimismo también se estreno para la Santísima Virgen una Cotilla o Ceñidor bordado en oro, donada por Dª María de los Angeles Arce Cobo, con diseño de D. Juan I. Guerrero Pérez y la supervisión en el trabajo de Dª Dolores González.

         A las 18:45 horas se abrieron las puertas del Templo, estando a cargo del Pregonero de la Semana Santa 2013, nuestro Hermano el Rvdo. P. Alfonso Gutiérrez Estudillo, Arcipreste de la ciudad y Párroco de la Parroquia de la Sagrada Familia.
         Diez minutos mas tarde de haberse abierto las puertas del Templo, salía el Divino Cautivo de la Isla, Jesús de Medinaceli, bajo el azul del cielo y a los sones de la Marcha Real y de la marcha “Requiem”, a cargo de la Banda de ccytt Santísimo Cristo de la Columna de Daimiel (Ciudad Real), recuperando un estilo musical que hacía 17 años que no llevaba, y portado por una cuadrilla de la Asociación de Jóvenes Cargadores Cofrades.
         Poco mas de las 19:30 cruzaba el dintel de la Iglesia Mayor la Virgen niña de la Isla, María Santísima de la Trinidad, a los sones del Himno Nacional y la marcha “Alma de la Trinidad” a cargo de la Banda Sinfónica Municipal de San Fernando, y siendo portada por una cuadrilla de la Asociación de Jóvenes Cargadores Cofrades.
         Una vez que la Archicofradía llegó a la capilla del convento de las RR. MM. Clarisas Capuchinas, se procedió a realizar la Estación de Penitencia a Jesús Sacramentado, con el rezo de Estación Menor y ofrenda floral y de luz. Un año más, los pasos de nuestros Titulares fueron vuelto hacia una de las ventanas del convento, para que nuestras Camaristas de Honor pudieran ver de cara a nuestros Titulares.
         El paso de Jesús de Medinaceli giró a los sones de las marchas “Silencio Blanco” y “Santísima Trinidad”, mientras que  el paso de María Santísima de la Trinidad lo hizo a los sones de la marcha “Soledad Franciscana”.
         Una vez realizada la Estación Menor en las Capuchinas, la Archicofradía siguió con su itinerario previsto, y en donde la climatología hizo que tuviéramos uno de los mejores Lunes Santo que se puedan recordar.
         Destacar que durante todo el recorrido se vio arropado de una gran multitud de fieles y devotos  que no quisieron faltar a su cita anual con su Medinaceli Isleño y su Madre Bendita de la Trinidad, estando completamente llena la Plaza Iglesia, como viene siendo habitual, para presenciar la recogida de la Hermandad.
         Quedaba poco para la 01:00 horas cuando María Santísima se acercaba a su Hijo Cautivo y Rescatado a los sones de la marcha “Hossanna in Excelsis”, para posteriormente rezar la última estación del Via Crucis.
         Tras la entrada de la Virgen en el Templo, a los sones de la marcha “Mater Mea” e Himno Nacional, le tocaba el turno al paso del Señor, donde giró para ponerse de cara a su pueblo a los sones de la marcha “Soledad de San Pablo”. Una vez enfilada la tarima, Jesús de Medinaceli comenzó a subirla muy lentamente a los sones de la marcha “Enmanuel”, donde hizo enmudecer  a toda la Plaza Iglesia en el magnífico solo  de corneta, para posteriormente rompiera en aplausos y vítores hacia la Bendita Imagen. Posteriormente se interpretaba la Marcha Real y así poder entrar Jesús Cautivo y Rescatado en su Templo,  para así un año mas despedirse de su pueblo.